Lo decía un tal Chamfort:
Un hombre debería tragarse un sapo cada mañana para tener la certeza de que el día no le deparará nada más repugnante.
¡Yo lo veo un poco pesimista! ¿y tu?
LOS CUARENTA
Se va alejando de los cuarenta, aunque todavía es una mujer atractiva como lo son las mujeres de esa edad, un poco entrada en carnes pero prietas, es decir ligera barriguita, pechos que un buen sujetador pone en su sitio, para que despunten, un buen culo, acogedor pero inaccesible, de esos que llenan los pantalones pidiendo libertad. Una libertad que nunca tuvo, o por lo menos no esa libertad que hace que disfrute y haga disfrutar a quien lo amase por amor o por amasar, que no es lo mismo aunque pueda parecerlo.
Ella siempre ha esperado al hombre que le hiciera las dos cosas a la vez, más lo primero que lo segundo, porque para ella eso era lo verdaderamente importante, el amor, el amor sincero e incondicional de un hombre bueno, cariñoso y guapo, guapo de aspecto y de gestos, caballeroso y amable, a la vez muy hombre y niño para dejarse querer y mimar, poder afirmarse en él y que no pueda pasar sin ella, tenerlo todo en una sola persona.
Mujer única, sola, no sola del todo porque tiene muchas amigas y también amigos, casi todos ellos casados con sus mejores amigas.
Pero cuando vuelve a casa esta sola, se desviste sola, come sola, duerme sola y se despereza sola por las mañanas. Todas las mañanas han sido así, solitarias, era en esos momentos, en ese instante mágico del despertar, cuando más deseaba que la amasen.
Cuida mucho su aspecto, como no, la ropa, el maquillaje, el pelo, gimnasio, toda ella recibe los cuidados necesarios para seguir manteniendo la ilusión, la imagen de sexualidad activa que debe dar una mujer en la sociedad actual, no esta bien visto lo contrario. Dejar de hacerlo es renunciar, dejar de esperar la oportunidad que no ha llegado ha presentarse pero que siempre está al caer. Todo esto no se comenta, todos lo adivinan pero ninguna es capaz de confesarlo sin tortura. Como tampoco confesarían que tipo de sexualidad mantienen, siendo vírgenes y con una mínima experiencia sexual, ¿como se excitan? ¿Que les excita y hasta que punto?
Me intriga.
El viaje
Hemos visto astros
y olas; hemos visto arenas también;
y, a pesar de choques e imprevistos desastres,
nos hemos, a menudo, aburrido como aquí.
CHARLES BOUDELAIRE
QUIERO SER TODOS ESTOS Y MAS
Si quiero ser un científico loco, una niña, una momia, ,un punky,un demonio, un payaso, un astronatua,una vaca, un gusano, una princesa,una gallina, un cerdo, caperucita y el lobo,etc, etc..
Por eso escribo cosas aquí.
Un tío de mi padre se presentaba para Factor de tren, trabajaba en RENFE y quería aprobar este examen para ascender, ya lo había intentado varias veces pero los nervios le traicionaban a la hora de la verdad. Por eso le gustaba ir bien preparado y ensayar el examen una y otra vez.
Yo era pequeño pero aun me acuerdo, todos mis primos y yo nos sentábamos alrededor de la mesa, teníamos que ir preguntándole uno detrás de otro el precio del billete entre dos ciudades. El lo calculaba según la distancia y la clase en que viajásemos. Para no repetirnos en las preguntas, nuestros padres nos apuntaban al oído con más o menos mala uva para ponerlo en apuros.
Pero lo realmente original era que él calculaba y contestaba a nuestras preguntas subido en la mesa mientras nosotros la movíamos, más y más fuerte cada vez, para simular que lo hacía en un tren en marcha.
Muchos me conocen pero nadie sabe como soy en realidad, no pueden imaginarse lo que siento. Yo tampoco puedo ir por ahí contando cosas sobre mí, solo dejo que vean de mi lo más superficial, la fachada. Lo que pienso, lo que siento, mis aficiones y mis vicios solo yo los conozco, no soportaría que nadie más estuviese al tanto de todos esos datos.
Aparentemente mi vida es tan normal, tan aburrida que parece vulgar, pero solo aparentemente.
Los pocos amigos que conservo son tales por pura casualidad, no hice nada para ganarme su amistad ni tampoco lo hago para conservarla y mucho menos para fomentarla. ¿Por qué iba a hacerlo? Mi sentido de la amistad, simplemente no existe. Yo no tengo amigos, son solo conocidos que en un momento dado me entretienen, me ayudan o acompañan y que infaliblemente acaban por aburrirme y estorbarme. No les despido ni me peleo con ellos, solo dejo que el tibio lazo que nos une se seque, como si dejase de regar un geranio, lo vería a menudo, lo tocaría pero sin hacer nada por él, sin mover ni un dedo, no me molesto ni pierdo el tiempo y poco a poco, muere.
No me apena, por lo tanto no sufro cuando desaparecen de mi vida, me hacen un favor como si fueran buenos amigos.
MAN RAY
AUTORRETRATO
Man Ray
Traducción de Catalina Martinez Muñoz
Alba. Barcelona 2004
486 pág. 31,90 Euros
Referencia de "Babelia"
http://www.manray-photo.com/
Hoy le he puesto musiquilla a mi blog, es de una cantante de jazz que me encanta, solo es el pie de una canción.
Se llama Silje Nergaard, os la recomiendo encarecidamente.
http://www.siljenergaard.com/
Mi padre y mi tío, que es un par de años menor, durante mucho tiempo compartieron la misma cama en su niñez.
Mi tío cargó durante toda esa época con el cartel del "meón" de la familia, casi todos los días aparecía una mancha amarillenta en el lado de su cama.
Pero tarde o temprano tenía que descubrirse la verdad y eso pasó cuando unos años más tarde mi padre confesó que era él el que no controlaba esfínteres.
Cada vez que se meaba, se despertaba y cambiaba de lado a mi tío haciéndole cargar con el "San Benito".
No os la vais a creer, pero a mi me ha pasado. Me he quedado viudo en mi noche de bodas, y todo por culpa de la dichosa película.
Mi historia es esta:
No os la vais a creer, pero a mi me ha pasado. Me he quedado viudo en mi noche de bodas, y todo por culpa de la dichosa película.
Mi historia es esta:
Todo fue maravilloso, la boda, el banquete, toda nuestra familia y los mejores amigos reunidos para celebrar con nosotros el día más feliz de nuestra vida, aunque yo personalmente esperaba con ansiedad la mejor parte de ese día, la noche.
Y digo esto porque los dos éramos vírgenes, mi novia también, pero yo, que lo puedo contar, lo había pasado muy mal.
Queríamos que todo saliera a la perfección, así que para esa noche lo preparamos tan a conciencia como lo demás.
Esa misma noche partía un crucero por el Mediterráneo la "mar" de romántico y nosotros teníamos reservado el camarote más lujoso.
Pero como también debíamos estar atentos a esos pequeños detalles que, a veces, pasan desapercibidos pero que son tan importantes como los grandes, yo tenía preparado un bote de lubricante, porque lo más importante para que una virgen deje de serlo es una perfecta lubricación, sea o no natural.
Y tal como lo planeamos así sucedió, todo funcionó como una máquina bien engrasada, no entraré en detalles pero fue maravilloso, nos dejamos llevar por la pasión y la lujuria de tal manera que una vez consumado lo que habíamos venido a consumar, nos dejamos llevar por la locura que nos embargaba y como locos corrimos medio desnudos hacia la proa del barco para imitar a la pareja protagonista de Titanic.
Y una vez encaramados en lo más alto me pidió que la sujetara fuertemente con mis manos porque quería sentir en su rostro de mujer mujer el azote salado de la brisa marina. Pero, oh desdicha, oh puerca miseria, coño que se me resbaló por e maldito lubricante y se la tragó el negro océano de las narices.
Antonio Latorre Jiménez